“El ápice de la raíz podría tener una función similar a la del cerebro de los animales inferiores, recibiendo señales y coordinando movimientos”. Esta idea fue formulada por  Darwin ya desde  1880 en “The Power of Movements in Plants” (el poder de los movimientos en las plantas) y ha sido sustentada con la detección de señales químicas y eléctricas en las raíces de las plantas que podrían ser análogos a los del sistema nervioso humano, indica la Universidad Autónoma de Barcelona. Así, la comunicación entre las células de las plantas dispondría de un “centro de operaciones” en el ápice de la raíz, similar al “centro de operaciones” que se ubica en nuestro cerebro humano, donde se integraría y se procesaría la información.

Las raíces pueden ser relevantes como órganos de acumulación de nutrientes de reserva, además de la funcionalidad cerebral indicada.  Así, si se dispone de un buen sistema de raíces y se le aporta humedad y nutrición requeridos, este sistema mejor conocido como sistema radicular enviará señales hormonales que incidirán en el desarrollo de brotes y frutos. El desarrollo radicular, en tanto, incide en la productividad y sustentabilidad de los huertos y muchos de los problemas de los frutales se originan en limitaciones o daños en las raíces.

De este hecho, se desprende la enorme importancia que tiene el cuidado de las raíces, y uno de los componentes de este cuidado es la prevención y control de plagas en ellas. Por ejemplo, cultivos de gran relevancia en nuestro país como el maíz, el agave y la caña de azúcar tienen un enemigo común: la gallina ciega (Phyllophaga ravida).

Los adultos hembras y machos de gallina ciega emergen con el inicio de las lluvias; las hembras depositan sus huevos cerca de las raíces de las plantas a poca profundidad y en suelo húmedo. La etapa larval pasa por 3 tamaños (estadios larvales) y es precisamente la etapa larval más grande (Larva 3) la más voraz que causa los mayores daños al cultivo. Las plantas dañadas por esta plaga presentan un amarillamiento generalizado para posteriormente marchitarse; mientras que el sistema de raíces es reducido debido a la alimentación de la larva.

 Con el objetivo de cuidar de estos cultivos existen insecticidas granulados que brindan protección al sistema radicular contra las plagas más comunes, como la mencionada gallina ciega y otras como el gusano de alambre e incluso termitas.  Un ejemplo es el Allectus GR del laboratorio FMC, compuesto a base de dos ingredientes activos Bifentrina + Imidacloprid, por lo que brinda una doble protección al sistema radicular contra las plagas de la raíz más importantes en el cultivo de agave. La doble protección ocurre porque se adhiere a las raíces, permanece cerca de éstas y se forma un bulbo de protección. Este producto es altamente efectivo en el control de la gallina ciega; exhibe repelencia y un efecto anti-alimentario, lo que resulta en menor tiempo de alimentación de las larvas y, por ende, menos plantas dañadas. Además, no es volátil ni libera polvo, por lo que el riesgo de intoxicación por inhalación es bajo; además, es un producto de banda verde.

En ZALUN queremos cuidar de tus cultivos tanto como tu. ¡Acércate a nosotros, podemos asesorarte!

FUENTE: Universidad Autónoma de Barcelona, Red Agrícola LATAM, FMC y SENASICA.