¿Necesario para enfrentar los problemas ecológicos?

Hoy en día, el manejo de plagas de plagas (MIP) tiene que hacer frente a los problemas económicos y ecológicos que se han derivado del uso de productos químicos en el control de plagas, pero también enfrenta el reto de seguir enfrentando a las decenas de miles de especies del reino animal que son considerada como especie de alto riesgo para el hombre, debido al impacto en la salud como vectores de enfermedades y también el impacto en la producción agrícola que se deriva. 

Con este gran reto, la diversificación de los enfoques inherentes a la idea del manejo integrado de plagas,  son necesarios para una mejor protección ambiental, considerando en ella el uso de productos y métodos alternativos que no representen un riesgo potencial para el humano y la ecología.  Entre las estrategias alternativas, el uso de plantas y los aceites esenciales ha sido explorado desde hace muchos años de forma doméstica pero también en laboratorios, sin embargo, su uso potencial de forma más amplia, es muy  prometedor. 

De acuerdo con Catherine Regnault-Roger de la Université de Pau et des Pays de l’Adour, “aunque el aceite esencial de eucalipto se ha usado  como insecticida sinérgico además de inhibidores del crecimiento, -por su parte,- los aceites esenciales de  menta verde, almendra amarga y abedul se han incorporado en una mezcla que muestra acaricida, insecticida y propiedades repelentes”. Por su parte, se ha demostrado que el  aceite de madera de cedro se utiliza principalmente como molusquicida, es decir, un agente para matar moluscos y babosas y que también es  tóxico para las chinches.

En especial, el aceite de cedro es un componente natural de la madera del árbol, Juniperus virginiana L y se ha utilizado ampliamente en los últimos años en  productos pesticidas como repelentes y depresores de la alimentación para controlar diversas plagas. 

Hoy en día, se estima que  los aceites esenciales representan una producción mundial total de 45000 toneladas, donde las mentas, cítricos y productos como el clavo y el cedro concentran más del 80% de esta  producción  y su utilización ha incrementado en la industria de aromas alimentarios sobre todo, por lo que a pesar de la aceptación y uso en aumento para elaborar productos para el manejo integrado de plagas , su uso en este sector podría ser de beneficio económico y ecológico.

Por ejemplo, el repelente Bug Off del laboratorio Buy Green, es un repelente a base de cedro y limón, de origen natural y  con acción repelente para las moscas. En Zalun, buscamos posicionar algunos productos para el manejo integrado de plagas que tomen en consideración este tipo de alternativas en pro de la diversificación de productos y métodos. ¡Podemos asesorarte! 

Fuentes: Catherine Regnault-Roger, “The potential of botanical essential oils for insect pest control”; Universidad de Florida “Cedar oil pest guide”.